martes, 15 de enero de 2008

Y todo sigue y todo vuela

Vaya, pues parece que va a empezar el dos mil ocho realmente.

Y eso que parece que todo sigue igual. Mi casa sigue en un lento proceso de arranque, que ya empieza a ser enfermizo (cuando dejaré de pensar que mi casa aún está arrancando...), sigo trabajando en un sitio que me gusta, pero que de alguna manera falla en la base, y eso me jode. Siguen habiendo problemas gordos por los que moverse y pocos que se mueven. Siguen existiendo potentes fuerzas para que nadie se mueva, y seguimos dejándonos convencer de que no nos movamos, porque todo sigue estando de puta madre.

A ver cómo se presenta este. Hay que decir que el 2007 ha sido bastante de cambio para mi, y mis alrededores. Un poco de estabilidad que no me hunda en la rutina, y un poco de desequilibrio que le ponga aliño a la ensalada vital.

De las buenas intenciones... que les den, no me rayo con esas gilipolleces. Para ser bueno, me hunto en chocolate.

Y esperemos que haya mucho placer y gozo que es lo que más mola.